Se acerca el día de todos los santos y como es tradición
aunque no de muchos años la noche del 31 de Octubre se llenara de calabazas con
formas terroríficas y niños y no tan niños disfrazados de vampiros, diablos, brujas,
zombies y toda clase de monstruos y criaturas relacionadas con las películas de
terror. Todo ello importado desde la cultura anglosajona.
No estoy en contra ni mucho menos de que se celebre
Halloween en España, si a mi me encanta todo lo relacionado con el terror, la
oscuridad, el miedo, la muerte etc… pero como pasa en los países anglosajones
Halloween se ha convertido en una fiesta completamente basada en el consumismo
por que en sus comienzos la celebración de Halloween no tenia nada que ver como
se celebra ahora.
Para los celtas que fueron sus creadores era la fiesta del
final de la recolección de cosechas y la entrada del nuevo año que coincidía
con la estación oscura. Ellos pensaban que cuando llegaba esta fecha la línea
que separaba el mundo de los vivos y los espíritus se estrechaba y podían estos
últimos traspasarla. Los ancestros de las familias eran invitados a la
celebración y por medio de trajes y mascaras se ahuyentaba a los espíritus
malévolos.
Aquí en España para la noche del 31 de Octubre víspera de Todos
los Santos ya tenemos nuestra propia tradición que aunque se mantiene a perdido
mucho peso con respecto a Halloween que es la representación de la obra Don
Juan Tenorio.
Don Juan Tenorio es la obra teatral mas importante del romanticismo
español escrita por José Zorrilla en 1844. El personaje de don Juan fue creado
por Tirso de Molina y en sus obras el burlador de Sevilla y el convidado de
piedra se inspiro Zorrilla para crear su Don Juan Tenorio.
En mi opinión creo que actualmente no se le da el valor que
se merece a esta tradición y pienso que aunque fuera de manera puramente
comercial con la obra de Don Juan Tenorio podríamos realizar en España una
fiesta parecida a la del Halloween actual, ya que esta tan de moda porque la
obra tiene elementos suficientes para crear un negocio alrededor de ella.
Aunque los tiempos no están para derroches ni gastos por
ejemplo las tiendas de disfraces podrían vender trajes de época inspirados en
los personajes y de fantasmas inspirados en los personajes que mueren en la
obra y los niños podrían ir por las casas pidiendo los dulces típicos españoles
de Todos los Santos en vez de diciendo truco o trato pues infierno o cielo.
En resumen ya que se
ha creado un negocio con la noche del 31 de Octubre víspera de Todos los Santos
pienso que la podríamos hacer con nuestras propias tradiciones.
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